Pascual Santos López

En muchas ocasiones encontramos pequeños documentos, cartas, facturas, fotos o incluso un simple sello de empresa en un papel, que los historiadores aprovechamos para tirar del hilo de Ariadna. En el caso que nos ocupa tuve la suerte de encontrar una tarjeta postal de la industria ciezana de José Gómez Velasco, remitida a Teruel desde Cieza en enero de 1945 y que ya forma parte de nuestra colección “Archivo Santos-Caballero”.
Por las noticias que hemos podido recabar, la familia Gómez Velasco era la arrendataria del Molino de la Huerta, más concretamente encontramos al cabeza de familia, José Gómez Maquilón, manteniendo un molino y una piedra de moler de 70 decímetros cuadrados, movida por fuerza hidráulica en el paraje de la Huerta, que se alimentaba de la Fuente del Ojo.
Según Antonio Ballesteros este molino también era conocido antiguamente como de la Encomienda o del Comendador. Gómez Maquilón mantuvo en explotación el más conocido por los ciezanos “Molinico de la Huerta” durante toda la década de los cuarenta y posteriormente pasaría a manos de su hijo Juan Gómez Velasco desde 1951 hasta 1959, que aparece en los documentos del Ayuntamiento como “Fallido”, probablemente porque la explotación de los acuíferos de la Sierra de Ascoy secaría la Fuente del Ojo. José Gómez Maquilón fallecía el 7 de noviembre de 1971 en la calle Víctor Pradera, 6 (Edificio Mina). Lo que hoy es la calle José Planes. Acompañado de sus hijos: José, Manuel, Jesús, Juan y Antonia Gómez Velasco.
Volviendo a la industria del esparto, encontramos a José Gómez Velasco manteniendo una fábrica de hilados entre 1944 a 1947 con diez ruedas de hilar en la Avenida del Caudillo. En la actualidad Camino de Murcia. En 1948 aparecen las diez ruedas de hilar de la Avenida del Caudillo a nombre de la empresa “Industrias de Esparto”, pero lo más curioso es que José Gómez Velasco aparece de nuevo con tres ruedas de hilar en la Calle Víctor Pradera entre 1951 y 1957. Eso nos hace pensar que puede que las diez ruedas anteriores fueran arrendadas y al pasar a otra empresa José Gómez luego tendría las otras tres en propiedad, aunque eso no lo sabemos con certeza.
Lo que si sabemos con seguridad es que José Gómez solicitaba en 1944 registrar la marca de su industria “W” para distinguir hilados y trenzados de esparto, siendo sus productos manufacturados todo tipo de cordeles, betas, sogas y trenza de dicha fibra. La marca se la concedían el 5 de diciembre de 1944.

Además de industrial del esparto, José Gómez Velasco era funcionario del Ayuntamiento de Cieza y estaba casado con Dolores Lucas Zamora, pues en 1950 la prensa se hace eco del nacimiento de sus dos gemelos y en junio de 1953 de un viaje particular a Marsella, puede que para dar salida a los productos de su fábrica.
Otra de las facetas de José Gómez Velasco era el periodismo, pues lo encontramos como corresponsal de La Verdad en Cieza durante la década de los sesenta y los setenta. Muy querido por sus compañeros periodistas, que le apodaban “Salieri” y publicitaban con regocijo las noticias de su familia, como la boda de su hija Antonia de la Cruz Gómez Lucas, en mayo de 1971, con Jesús Balsalobre Alguacil en la iglesia de San Juan Bosco; o el nacimiento de su nieto Miguel Ángel en octubre de 1976, segundo hijo de su hija María Dolores y Antonio Caballero García.
A pesar de la crisis del esparto José Gómez siguió intentando desarrollar y perfeccionar productos de esta fibra tan ciezana, ya que precisamente el 13 de octubre de 1971 solicitaba registrar patente por veinte años por un “Procedimiento industrial para la obtención de fibras de esparto blanqueada y esterilizada para diversos usos”. Patente que le concedían el 13 de julio de 1973, donde explicaba una forma de blanquear el esparto directamente recogido tras su exposición al sol en la tendida, puesto en haces verticales de un solo atado en cámaras herméticas, se le sometía a los gases del azufre, hasta que se sacaba cuando gracias a una mirilla se veía que estaba blanqueado y esterilizado. Al parecer nuestro inquieto industrial, periodista e inventor estaba enfermo y según la noticia de su fallecimiento, se había jubilado del Ayuntamiento dos años antes, debido a la enfermedad que padecía y aunque no ofrecía extrema gravedad un fallo cardiaco le produjo la muerte en la mañana del jueves 10 de enero de 1980. Triste noticia que causó profundo sentimiento ya que era muy querido en el pueblo. Esperemos que esta humilde reseña sirva para recordar la memoria de este ciezano.
Publicado por Pascual Santos López en El Mirador de la Prensa, 14-5-2021, p. 16.